Quizás, en general, pensemos que la época de la posguerra en nuestro país fue un tiempo triste y gris, falto de cualquier expresión creativa. Puede ser que la información recibida por los medios oficiales nos retrate eso y con el tiempo esa es la percepción que se haya instaurado en las mentes de la gente en general. Pero la realidad nos muestra que no fue exactamente así. Al lado de aquella España folclorista y continuadora de unas virtudes ya caducas, en el mundo de la cultura nacional, había otros caminos que se empezaban a recorrer.
En realidad, esos caminos a los que me refiero habían tenido sus antecedentes. Recordemos el milagro que se había producido no solo en nuestro país sino en todo occidente, entre el final del siglo XIX y el primer tercio del XX. El excepcional cambio que revolucionó no solo las artes sino también todos los ámbitos de la cultura y la técnica. Un fenómeno extraordinario que cambio la visión de prácticamente todo el porvenir del ser humano y que solo truncó el desastre de la guerra.
Tras esta pequeña explicación del estado de la cultura en nuestro país allá por los años cuarenta del siglo XX y sus antecedentes, volvamos a la actualidad con un fenómeno que se ha producido en nuestra ciudad, Barcelona, por casualidad o no…
Dos exposiciones por las que me he paseado y que nos dirigen hacia el mismo lugar. Dos muestras de dos artistas esenciales en el vanguardismo del siglo XX en nuestro país y que dieron un vuelco junto a otros tantos a la cultura que podía observarse a nivel oficial. Pero la casualidad o no, radica en que los dos pertenecieron al mismo grupo que ayudó a cambiar la perspectiva de todo ello. “Dau al set”, el dado de siete caras, una percepción surrealista y que definía perfectamente su línea de actuación y tomado posiblemente de una frase de André Breton “La séptima cara del dado”.
Jóvenes y con ganas de dar un cambio al sentido del Arte en Barcelona y en España en general, se aglutina este grupo en torno a una persona clave en la intelectualidad de la segunda mitad del siglo XX en Cataluña, Joan Brossa. Este personaje es el inventor de la poesía visual, un juego, una maravilla que, rozando la ironía más espléndida y el puro cinismo intelectual, solo para personas abiertas de mente y por que no decirlo de corazón y espíritu, es capaz de abrir una ventana inédita en el panorama de las letras en este país. Bueno de las letras por encuadrar su poesía en un lugar al uso pues ésta, podría extenderse al campo de las artes visuales.
La muestra en el Museu d’Art Contemporani de Barcelona (MACBA) es verdaderamente exhaustiva. Toda una planta de este edificio inmenso dedicada a la exposición de una manera muy clara y fácilmente entendible. El Museo hace así valer el depósito que en 2011 hizo a sus dependencias el Fondo de la Fundación Brossa.
El Fondo consiste en obras manuscritas, documentos, correspondencia y su biblioteca personal, entre otros materiales, y constituye una herramienta inigualable para abordar el interesantísimo trabajo de este artista.
Muy recomendable su visita, nos acerca a un universo especialmente atractivo en el que lo que parece un juego intelectual, no es más que una crítica, a menudo feroz a todo el sistema que en aquel tiempo imperaba y que visto lo visto, no era demasiado distinto, quizás remozado o recién pintado, del actual. 70 años después. No es una exposición al uso, sino que requiere de una atenta mirada y una cierta gimnasia mental para conseguir captar la sutileza de la obra de Joan Brossa.
Y siguiendo con la casualidad que apuntábamos al principio, en el espacio de las exposiciones temporales de la Casa Milà, conocida por todo el mundo como “La Pedrera”, visito una muestra que con el nombre de “Diábolo” presenta un exhaustivo recorrido por la obra de Joan Ponç que como sabemos fue otro miembro destacado de “Dau al Set”. Por lo tanto y tras muchos años de olvido nos encontramos ante dos exposiciones de miembros de aquella ya mítica asociación.
Comisariada de una forma muy lograda por Pilar Parcerisas, que demuestra un profundo conocimiento de la obra de este artista visionario y temperamental, de una visión estética única y original dentro del panorama de su época.
La muestra empieza con su obra de postguerra y sus comienzos en “Dau al Set”. Con una pintura que fue una de las piedras angulares de la renovación artística y que a menudo nos renueve lo más profundo de nuestros sentimientos explorando los rincones más profundos y escondidos del ser humano.
Es evidente que la obra de Joan Ponç tiene una personalidad fácilmente detectable. Sus personajes grotescos, carnavalescos, a veces diabólicos constituyen y habitan un mundo que nos adentra en un mundo surrealista que va más allá de la pintura y entronca fácilmente, como así fue, con la poesía de Joan Brossa.
Una vez visitadas estas dos exposiciones que han llenado el triste otoño barcelonés con un soplo de calidad no nos queda más que recordar el papel que tuvo en su época y que para el mundo de la cultura todavía tiene aquella casi milagrosa unión que fue “Dau al Set”. A menudo ha sido ignorada por las actuales tendencias artísticas, muchas veces borrado su recuerdo por un desmesurado, creo yo, culto a la figura de Antoni Tapies miembro que en cierto modo fagocitó a todos los demás en aras de un egocentrismo que tuvo la suerte además, de estar acompañado por un reconocimiento de la crítica en muchos casos con un cariz político ajeno totalmente a la intención de aquel mítico grupo de jóvenes que remozó el panorama cultural en Cataluña.
No puedo, antes de terminar, dejar de mencionar a otro grupo parecido y que surgió en Madrid a finales de los 50 y que se llamó “El Paso”. Igualmente, a menudo olvidado por los “gurús” del arte y que fue decisivo en la progresión de la Cultura en España. Aunque posterior a “Dau al Set” no deja de tener unas connotaciones similares para comprender la evolución de la vanguardia artística española que plantearía unas bases a la modernidad que quizás ésta no ha seguido con la calidad que cabría desear.
Lo siento, pero siempre me viene a la cabeza uno cuando pienso en el otro….

Poesia visual
Joan Ponç
Catálogo Joan Ponç

En nuestras «Historiarts paralelas» tenemos una entrada dedicada en cierto modo a este grupo de artistas que fue «Dau al Set».

Para verla seguir el enlace:

https://elquatre.com/historiarts-paralelas-15/

Poesia Brossa en el MACBA hasta el 25 de Febrero
Joan Ponç, Diábolo en la Pedrera hasta el 4 de Febrero